Simona Chmelíková

Alumna 2020
Licenciatura en Relaciones Internacionales

En marzo de 2020, solicité el puesto de segundo ayudante del Vicepresidente de la región de BBSK y me alegré de que me aceptaran. Sin embargo, mi fecha de inicio se pospuso debido al aumento de casos de COVID-19 durante la primera oleada de la pandemia. Fue un periodo duro, pero mantuve activamente el contacto para expresar mi profundo interés en seguir en el puesto hasta que, casi un año después, el 13 de enero^th 2021, me invitaron de nuevo a una entrevista, aceptando el cargo de Coordinador de Centros de Vacunación en la región de BBSK una semana después. El trabajo que realizamos es en estrecha colaboración con una agencia de eventos cuyo trabajo consiste en garantizar la aplicación de todas las medidas Covid-19. 

Antes de que se construyera el primer centro de vacunación, trabajaba principalmente como ayudante del director del proyecto, pero ahora coordino la vacunación de las personas discapacitadas de nuestra región. Esto implica capacidad de gestión, programación, estar en contacto con los médicos y mantener una actitud positiva. Ver a los discapacitados incapaces de moverse por sí mismos es duro, pero el mayor placer es ver su felicidad al recibir la vacuna.

Nuestra región, Banska Bystrica, fue la primera de Eslovaquia en abrir centros de vacunación con capacidad para vacunar a 1.000 personas al día. Nuestras acciones inspiraron a todas las demás regiones del país a hacer lo mismo y, como tal, han acelerado el proceso de vacunación en Eslovaquia. Para hacerlo aún más accesible, introdujimos la vacunación "sobre ruedas", en la que vamos de pueblo en pueblo para vacunar al mayor número posible de personas. 

Aunque requiere mucho esfuerzo y experiencia, poner en marcha el plan de vacunación y coordinar el centro es un proyecto increíble y gratificante. A decir verdad, al principio me sentí un poco abrumada en mi nuevo papel, pero me siento muy honrada de trabajar en este proyecto y me apasiona ayudar a que el mundo vuelva a la normalidad. 

En general, estoy muy agradecida por mis experiencias en la AAU, ya que me han enseñado valiosas lecciones sobre el lugar de trabajo. Ahora soy capaz de hacer frente a las dificultades y he aprendido que el fracaso es un peldaño hacia el éxito: cuando algo no sale según lo planeado la primera vez, siempre puedes volver a intentarlo y conseguirlo poniendo más trabajo y esfuerzo. Sentí esto mientras esperaba para unirme al equipo de BBSK y ahora no podría estar más feliz en mi puesto.

Que todo el mundo goce de buena salud.